El domingo 30 de julio, Fr. Massimo Fusarelli, Ministro General, llegó a Lisboa para un encuentro con los frailes franciscanos y los jóvenes del Movimiento Laudato Si’ (MLS). Ambos grupos se preparaban para desarrollar un programa sobre Ecología integral en la JMJ Lisboa 2023.
Ellos, frailes y jóvenes, llevaban reunidos una semana en el colegio franciscano Externato de la Luz, de la Provincia Franciscana de Portugal, lugar que les acogería por una semana más. Las inscripciones de estos casi noventa voluntarios se realizaron a través de la Oficina general de JPIC y el MLS.
Unas horas después de su llegada, Fr. Massimo presidió la eucarístia. En su homilía recordó la alegría que produce el encuentro con Jesús y que se compartirá con otros jóvenes en la JMJ. Muchos de ellos, afirmó, viven con miedo y ansiedad de cara al futuro climático del planeta. “¿Cómo podemos cantar Laudato si’ mi Signore en una tierra tan violentada?” se cuestionó. La sabiduría que pidió Salomón es la que necesitan los que tienen en sus manos el destino de los pueblos y también nosotros, “llamados a una profunda conversión ecológica para aprender a habitar este mundo como huéspedes y no como amos, como guardianes del jardín y no como depredadores del tesoro y la perla de Dios”, expresó. Por último, deseó a todos, en nombre de san Francisco de Asís, una buena Jornada Mundial de la Juventud.
Terminada la eucaristía y luego de una breve pausa, se dio el espacio en el auditórium del Externato para un diálogo fraterno con el Ministro General. Algunos de los presentes le expresaron sus preocupaciones ante la problemática ambiental actual y la falta de sensibilidad hacia el cuidado de la casa común por parte de cristianos y políticos. Al mismo tiempo, mostraron sus deseos de cambio y las convicciones que los acompaña en su vida cotidiana. Además, le interrogaron sobre posibles iniciativas para un cambio de mentalidad en clave de conversión ecológica.
Fr. Massimo compartió algunas experiencias y buenas prácticas que ha encontrado en frailes, laicos y gobiernos durante sus visitas a los cinco continentes. Reconoció que el tema de ecología integral tiene aún mucha resistencia en ámbitos eclesiales y franciscanos. Adujo que falta encontrar la relación entre la fe cristiana y el daño que se hace a la creación de Dios. El misterio de la encarnación nos ayuda a entrar en esa sensibilidad porque Jesús en ella asume las preocupaciones de la humanidad y de la casa común. Invitó a colaborar y hacer conciencia desde la realidad local en que se vive. La tarde terminó con la entrega de una Tau por parte del Ministro General para cada participante y la respectiva fotografía de grupo.
Al día siguiente, Fr. Massimo participó, junto con los otros Ministros Generales de las obediencias franciscanas, en el encuentro Internacional de la Juventud Franciscana (JUFRA).